Llegaba de la mega fiesta solo un poco tomado lo típico de cada viernes social típico llegar a las 3:00 am lo normal, no digamos que mi vida es perfecta, pero me gusta como estoy, tengo una novia hermosa un trabajo estable y buenos amigos, el único problema es que mi familia me desprecia, bueno que más les quiero contar lo que me sucedió aquella madrugada para que decirles mi nombres esta de más. A punto de insertar la llave en la cerradura, el ruido de un golpe en el interior del apartamento me frenó en seco.
Mi corazón se saltó un latido sentí incluso como se paró por un instante y solo me preguntaba. ¿Quién estaría adentro? Mi novia, la acabo de dejar en su casa mis amigos siguen toda la madrugada ¿Un ladrón? Imposible. El edificio era seguro cerré bien todo. Un vigilante cuidaba a toda hora la entrada principal. Además, no veía señales de que la puerta hubiera sido forzada o un vidrio roto
Respire y decidí entrar para descubrir cual fue aquel ruido
Metí la llave, giré la chapa y empujé la puerta.
–A que día tan cansado me iré a preparar algo –hable fuerte con decisión mi vos no demostraba miedo.
Parecía todo normal
Me encogí de hombros. El ruido habría salido del apartamento vecino o de algún objeto mal acomodado o un ratón un animalito que ande en la casa no debo preocuparme
Caminé desprevenido por el corto corredor de entrada quería ir a la cocina por aquel pastel que había dejado
Giré a la izquierda para atravesar el comedor hacia la cocina.
Una sombra negra se me echó encima.
Mi respiración se cortó. ¿Qué era…? Me puse pálido incluso las piernas me temblaban
Una mano agarró mi camisa y un puño se movió veloz hacia mi cara.
Levanté un brazo por reflejo pero estaba ebrio, apenas desvié el puñetazo que aterrizó con fuerza en el costado izquierdo de mi cabeza provocando un dolor al instante por todo mi cráneo mis ojos no podían ver todo se nublo y caí al suelo